Nubarrones en mi mente

He pasado demasiado tiempo sola, a nivel laboral y familiar.

En parte por mi rebeldía temprana y deseo de ser independiente y a la par aventurera sin temor de empezar desde cero.  Sin dinero, sin un lugar dónde vivir.  Con mi vida en 2 cajas y un par de bolsas de ropita.

Ese no ha significado problema...
El problema es estar alejada físicamente de los demás.  
De por sí casi siempre fui poco social. Más bien introvertida o desconfiada.

Y ocurreseme empezar a hacer home  office en el 2010.

No estuvo tan mal.  Pero también fue una especie de labor híbrido, pues adoraba las ventajas de trabajar desde casa,  pero nunca estuve dispuesta a cortar contacto social con mis compañeros...

Los eventos a mi cargo aún en otras ciudades, me mantuvieron en el nivel decente de cordura y logré un equilibrio sano entre trabajo y vida personal...

Analizo este tema porque nunca antes fué tan marcado y difícil despertar cada día sabiendo que no vería físicamente  a nadie conmigo. 

Mis conocidos en otras ciudades. Mi familia trabajando al otro lado del mundo 

Y yo un poco negada a explorar una pequeñisima ciudad y entretenerme. 

Y aún así, tampoco son problemas...

El verdadero problema, es que he caído en una situación rara en la qué cada vez siento más cerca que perderé la razón. La noción de la realidad y mi entorno.

Podría traducirlo en lenguaje coloquial como qué me siento un fantasma y a veces dudo de mi existencia.  Es decir NO ME SIENTO VIVA.  Me siento ajena, en otro plano,  irreal, ausente, sin sensaciones del mundo. Insensible 
Totalmente ajena,  sin emociones ni motivación 

Pasa constantemente y cuando lo percibo me obligó a sacar de mi mente la nube. Y pesadamente lo consigo. 
Y no dura mucho.  Y regresa y se repite la lucha entre mi mente y esa irrealidad y a veces me asusta y estresa. 

No sé  como evitarlo.

Peleó mucho por controlarlo, me agota, me entristece, me confunde pasar por esos episodios mezclados de ansiedad y pánico. 

Hace pocos días me ocurrió mientras estaba en la pista de una unidad deportiva. Mientras caminaba a toda velocidad... y me recorrió un frio y se nubló mi mente, algo estaba mal,  no sabía que,  pero tenia miedo de estar ahí en medio de la noche,  sola. Y rápidamente busque con la mirada a otros deportistas,  hombres y mujeres,  planeando qué si mi ataque de pánico se agudizaba, acudiría a alguno para pedir: un abrazo. 

No ayuda o algo así,  mi cabeza quería UN ABRAZO de consuelo, de saber que no estaba sola,  que era parte de este mundo qué se ha convertido en un ambiente extraño para mi,  sin saber porqué...

Y fui al súper cercano.  

Y mi terapia fué: ver gente viva,  sentirme un poco parte de esa masa de humanidad intentando satisfacer sus necesidades básicas. Y funcionó temporalmente.

Volví a casa. Los gatos me esperaban para su cena. Y fui útil.  Y dormí

Confieso, que, los últimos días no he salido mucho a caminar  o nadar... porqué me da miedo...

Es un miedo irracional a creer que no volveré o algo malo me va a suceder. 

Qué mi cabeza explotará y mis pies me llevará sabe dios a dónde.  

Y no es fácil vivir así,  teniendo miedo de mi misma.  Y no se cuánto tiempo voy a conseguir soportando esto, o si seguiré luchando. No sé.

En resumen,  no soy mentalmente una persona que pueda o deba estar sola, sin cuidado, porque ya no me siento capaz de ayudarme.

La medicina no está siendo suficiente 

Las motivaciones no están siendo fuertes

Mi vida no está entusiasmandome por más que me trato de convencer de que sí 

Estoy mucho más sensible qué nunca y todo desdén por ligero qué sea me pesa cómo el océano entero en el corazón 

Estoy a unos días de un viaje muy esperado y planeado, y hoy a poco tiempo de ello,  no sé si voy a llegar a la fecha de viaje.  
Y no es que éso esté queriendo, pero tengo tanto miedo de estas sensaciones raras qué ya no sé que va a ser de mi...

No lo sé...

Comentarios

Entradas populares de este blog

Terry y Candy...finalmente juntos y felices....

En busca de Terry Grandchester....de carne y hueso...